David solano (actor).

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos... Por eso, canta, ríe, baila, llora y vive intensamente cada momento de tu vida... Antes que el telón baje y la obra termine sin aplausos. -Charles Chaplin-

POR LA REVISTA ELITE: ESCRITORES INTERNACIONALES, No. 35

15 DE FEBRERO DE 2023 POR SOL BARRIENTOS.

David Solano nace un 18 de enero en la Ciudad de México. Dentro de una familia de ingenieros, maestras y contadores, el arte era un hobby al cual se le tenía gran valía. Tataranieto de José María Velasco, la pintura fue importante en su desarrollo; pero, fueron sus tíos quienes le compartieron el gusto por la música, por medio del canto y la guitarra. Su evolución artística fue del canto al teatro musical para dedicarse, después, completamente a la actuación; primero en teatro y luego televisión y cine.

El actor no debe aparentar en el escenario, sino existir de verdad; no debe representar, sino vivir.-Konstantín Stanislavski-

Foto: David solano.

ENTREVISTA

REEI: David Solano, háblanos un poco de ti. ¿Quién es David Solano?

DV: Soy una persona curiosa, siempre he querido conocer y hacer más. Esto me ha llevado a un mejor autoconocimiento, porque entendí mis límites en muchos aspectos al tratar diferentes disciplinas. Por ejemplo, en correr, por más que me esforzara siempre había alguien más rápido, más fuerte, más resistente. Esto lejos de desmotivarme, me hizo dar cuenta de quién soy, cuando topas tus límites y comprendes que necesitas de otros con habilidades diferentes para superarte a ti mismo. Entonces surge más curiosidad para saber cómo ser mejor. Uno debe tener la actitud y la pasión en todo lo que se emprenda, pero con los pies en la tierra y la humildad de no sentirse superior, sino ser consciente que somos quienes somos porque hubo alguien más que confío en nosotros y de quienes aprendimos. Mi curiosidad me llevó a probar cosas diferentes a lo largo de mi vida.

Empezando por los deportes, desde niño fui muy activo, lo que me llevó a practicar natación, basketball, voleibol, artes marciales, ciclismo, patinaje, ping pong, correr, y hacer ejercicio en el gimnasio. En la parte artística comencé por lo musical, con la clásica flauta en la secundaria; tomé algunas clases de piano, guitarra y canto, que creo es lo que más me gusta, musicalmente hablando. En los estudios, mi curiosidad me llevó a estudiar la carrera de Etnohistoria y de Diseño Industrial. Luego esta misma curiosidad, me llevó a convertirme en actor; lo cual, debo decir, fue totalmente accidental. Soy bastante sistemático, me organizo y a veces soy muy severo conmigo mismo; pero, el ser así, es lo que me ha llevado a tener una mejor disciplina en todo lo que he hecho y lo que me ha ayudado a sobrevivir. Sí, a veces, me dejo llevar por las situaciones, pero me gusta siempre tener el control de mí.

REEI: David, sabemos que eres actor, ¿es difícil ser actor? ¿qué te inspira?

DS: Sí, para ser actor se necesita de mucha resistencia y paciencia que no todos tienen. Sobre todo, al principio que no conoces el medio y desconoces como meterte en él, nadie te conoce, el medio es tan grande que es complicado dirigirte hacia las puertas indicadas y puedes perderte; cuando las tienes frente a ti, tocas a las puertas una y otra vez; pero parece que nunca se van a abrir. Ah, pero cuando se abren y te dan un personaje para un proyecto, es la sensación más fabulosa que puede haber. Es difícil ser actor porque vivimos buscando trabajo, haces casting tras casting con la esperanza de que te llamen para uno; pero, la mayoría de las veces no te quedas. Pueden pasar semanas o meses sin que te llamen para algo, y es aquí donde uno debe resistir y ser paciente. Otras veces te llueve trabajo por todas partes y ya no sabes cómo dividirte o qué rechazar. Es por ello que, a veces, aludimos mucho a la suerte y se dice la frase: “Cuando es para ti, ni aunque te quites; cuando no es para ti, ni aunque te pongas”. Sin embargo, aunque sí creo que haya algo de suerte, se requiere mucha preparación, estar continuamente ejercitándose y seguir aprendiendo más, la mayor parte es el trabajo que uno hace, no la suerte. Esta es una profesión a la que se le debe tener todo el respeto. Al dedicarme al entretenimiento, lo que me inspira es la gente, tanto aquellos espectadores que me ven en el teatro o en sus pantallas. Saber que les doy un momento, lejos de sus vidas cotidianas, donde disfrutaron mi actuación y eso les hizo pensar o imaginar en algo que puede cambiar sus vidas. Recuerdo una vez que dimos una función de una adaptación de “Romeo y Julieta” en una escuela, una niña me buscó por redes sociales solo para decirme que le había gustado mi actuación; ese suceso alimentó mi alma.

REEI: Cuéntanos acerca de tu primera experiencia como actor.

DS: ¡La primera, cómo la sufres! Fue en el teatro de la preparatoria donde estudié. Entré a un taller de Arte Dramático, por curiosidad, cuando vi a unos compañeros ensayar mientras yo solo perdía el tiempo. Me les acerqué, les pregunté qué hacían y de pronto ya era parte del elenco, sin saber absolutamente nada de actuación. Así, virginal ante un escenario, con mis líneas memorizadas, lo primero es perder el miedo al ridículo que piensas que harás; lo segundo es perderle el miedo a la gente, pues minutos antes de entrar a escena es que te “cae el veinte” de que todos los ojos estarán puestos sobre ti. Estaba lleno de adrenalina y solamente me aventé al escenario a hacer lo que había ensayado. Me parece que son los miedos más comunes de la gente, afortunadamente vencí esos miedos en ese momento y fue algo que me encantó. Pero esto fue una obra que solo se presentó una vez y ya no busqué más teatro, como entré a la universidad, me enfoqué más en ello. Sin embargo, un 14 de febrero, una amiga me habló de un casting que estaban haciendo en el teatro, que ese era el último día y que debería ir a hacerlo. Yo ni sabía qué obra era y no tenía interés, pero mi amiga fue insistente; lo que le dije fue que si se me iba el camión iría a la audición, sino ya me iba a mi casa; era un viernes en el que estaba muy cansado, cargando mucho material de dibujo, y llevaba flores para regalar a mis familiares. Total, se me fue el camión y el siguiente saldría una hora más adelante. Me molesté, pero soy una persona de palabra y me encaminé a la audición; además, hacía mucho calor y tenía que caminar hasta el teatro todo cargado de cosas. Llegué y me apunté en una lista, era el último y me hicieron esperar. Cuando pasé, casi aventando la puerta, me senté y era evidente mi enfado. Hice el casting, lo que me pidió el director, y me quedé en la obra, iban a montar “Equus”. Fueron ensayos arduos, a veces, hasta la madrugada; pero, para mí era entrar a otro mundo… lejos de lo estresante que es la Universidad; me encantaba estar ahí, y me enamoré del escenario. El director me dijo, después de haber terminado la temporada, que me eligió por la mirada que tenía cuando llegué a la audición.

REEI: ¿Cómo te diste cuenta de que actuar era tu pasión?

DS: Dejé aquella universidad, y sin recursos económicos iba a pasar un año sabático antes de poder entrar a otra universidad. Mientras tanto entré a otra escuela, una de actuación; con la rotunda oposición de mi papá, mi mamá sí me apoyó económicamente con una parte de la colegiatura, lo demás lo tenía que pagar yo y lo hice con el dinero que ganaba cantando en un coro. Fueron momentos difíciles; porque la situación económica familiar era muy mala, y aun así estaba trabajando y estudiando lo que quería, aunque a veces no tuviera para comer, disfrutaba de cada clase y las aprovechaba al máximo. Cuando entré a la universidad, dejé la actuación; pero, únicamente, por un par de años. Ingresé a una agencia y cuando salía de la escuela me iba a hacer castings para comerciales, eso fue en el 2006 y desde entonces no lo he dejado.

Cuando estudié la segunda carrera, algunos compañeros me decían que para qué estudiaba si yo me iba a dedicar a la actuación. Descubrí que era mi pasión cuando, sin importar que estuviera haciendo otras cosas, mi prioridad siempre era la actuación.

REEI: ¿Qué has sacrificado por seguir tu sueño?

DS: En mi muy particular caso, pienso que una estabilidad económica y un futuro con menos incertidumbres. Como lo mencioné, tengo otras dos carreras, y pude haberme dedicado a ellas, en algún momento sí trabajé en una oficina tanto como diseñador y como antropólogo, solo duré 2 meses, y saliendo me puse a actuar de lleno. Pero veo a mis excompañeros de las universidades haciendo lo que llamaríamos “una vida normal” y a veces quisiera tener algo más estable. Me refiero a no saber cuándo será mi próximo trabajo y estar siempre a la caza de castings o trabajando en horarios fuera de lo normal. A veces pienso e imagino qué hubiera sido de mí si me hubiese dedicado a la antropología o al diseño, y tener una vida más normal.

REEI: Cuéntanos acerca de tu trayectoria como actor.

DS: Puedo decir que empecé como actor de teatro, en aquella temporada de “Equus”, y a partir de ahí he estado en varias obras de teatro independiente presentándome en diversos escenarios, siento que las obras que más disfruto interpretar son las que son farsa, como en la adaptación “Don Juan Tenorio, a falta de otro”. Cómo al principio no pegaba en los castings, fui extra para ganar dinero, mientras seguía haciendo castings para otros proyectos. He grabado varios comerciales y seguro les debió salir alguno en el que salgo, en alguna red social, página de videos, tele o en el cine. En series, la primera en la que participé fue en “Hasta que te conocí”, después me dieron un personaje en la tercera temporada de “Blue Demon”, así he hecho algunos papeles en varias series, incluso internacionales. En cine he grabado muchos cortometrajes, algunos ganadores de premios como el caso de “Antropogénico” y participado en diferentes festivales; películas que filmé: “A sangre fría” y “2056 Bucle: La era de la oscuridad”.

REEI: ¿Cómo se llama la última película o novela donde actuaste?

DS: “2056 Bucle: La era de la oscuridad” que aún no se estrena. Hace unas semanas grabamos un cortometraje para el 48HFP. Y hay una serie que grabamos el año pasado; pero, no puedo dar datos de esta.

REEI: ¿Cómo calificarías el ambiente de los actores?

DS: Trabajando suele ser divertido, la mayoría tratamos de llevarnos bien y hacer más ameno el trabajo. Fuera del set, tratamos de apoyarnos entre nosotros, avisándonos de castings o ayudándonos en los self tapes que nos piden.

REEI: ¿Qué consejos le puedes dar a una persona que quiere ser actor?

DS: La práctica hace al maestro, que no desperdicien oportunidades de actuar para saber si es su pasión y así seguir preparándose para los futuros retos que la profesión exige. Y algo muy importante, la seguridad en sí mismo, eso te abre muchas puertas.

REEI: David, queremos darte las gracias por la entrevista. ¿Tienes algunas palabras para la Revista Elite Escritores Internacionales?

DS: Gracias a ustedes por la entrevista y por voltear a ver al talento mexicano que no es famoso.

Foto: David solano.